Este libro es una mezcla de filosofía de vida y psicología aplicada al plano existencial.
Es muy interesante, pero algo engorroso, porque introduce muchos ejemplos estadísticos para confirmar sus teorías, pero que no tengo claro si está contrastado ó no.
De cualquier forma, el autor nos mete en todo momento un ejemplo cómico, que a mí particularmente, me ha sacado varias sonrisas, porque a todos nos ha pasado alguna vez algo similar a lo que nos cuenta.
Desde mi punto de vista, estamos todos conectados de alguna forma, en la forma de ser y proceder en muchos aspectos de la vida cotidiana.
Si tuviese que destacar algunas frases del libro, porque resumir en pocas palabras lo que nos vamos a encontrar en este libro, desde ahora lo digo, es imposible, destacaría lo siguiente :
Si el pasado es una pared con agujeros, el futuro es un agujero sin paredes.
Tomamos decisiones sobre con quién nos casamos, dónde trabajar, cuando reproducirnos o dónde ir a vivir tras la jubilación, y basamos esas decisiones, en gran medida, en nuestras creencias sobre qué se sentirá si ocurriera ésto, pero no aquello.