He asistido a un webinar de la autora de referencia, y, como siempre, me ha parecido interesante lo que nos ha dicho, sobre como pasar del Ego a la excelencia ó armonía, luchando contra nuestras debilidades, obsesiones y traumas pasados y presentes.
Insiste en que somo seres espirituales interconectados con los demás seres humanos, debemos no identificarnos con nada material, puesto que no somos nuestros títulos, ni nuestros bienes...
Independientemente de que al finalizar nos invitara a 8 semanas de mindfulness, previo pago, por supuesto, de una cuota, algo significativa, creo que simplemente es cuestión de práctica hacer frente a las distracciones que nos vendrán una y otra vez al hacer dichas meditaciones.
Paso a desglosar los siguientes puntos que nos pueden ayudar en nuestro día a día.
1.- No juzgar.
2.- Paciencia: Ver a nuestros "enemigos" como maestros, y, aprender como no ser.
3.- Mente de principiante: O sea, mente fresca.
4.- Confianza: En uno mismo. No dar importancia a la opinión de terceros.
5.- No forzar: Estar, ser, dejar ir los pensamientos que nos vienen.
6.- Aceptación: De tal y como es este momento.
7.- Dejar ser: Convivir con lo que nos sucede en el ahora.
Cómo identificar al Ego para evitarlo:
Para facilitar la identificación y comprensión, os voy a citar algunos ejemplos de patrones basados en el ego:
- Culpar, juzgar, acusar, criticar, quejarse.
- Identificarse con posiciones mentales y creencias, necesitar tener razón, tener “enemigos”, aplicar etiquetas negativas a las personas.
- Requerir reconocimiento por algo que hiciste, y enfadarte si no lo consigues.
- Tratar de llamar la atención hablando de tus problemas, las historias sobre tus enfermedades o montando un número de cualquier tipo.
- Dar tu opinion cuando nadie la ha pedido y no aporta nada a la situación.
- Estar más preocupado con cómo te ve la otra persona que por la otra persona. Es decir, utilizar al otro como reflejo del ego o para incrementar el ego propio.
- Intentar impresionar a otros a través de las posesiones, el conocimiento, la apariencia, el estatus, las habilidades, la fuerza física, etc.
- Sacar a la superficie un ego inflado a través de reacciones de enfado contra algo o alguien.
- Tomarse las cosas de manera personal, sentirse ofendido.
- Tratar de demostrar que tienes la razón y que otros están equivocados a través de quejas o argumentos verbales o incluso mentales.
- Intentar ser visto o reconocido, o aparentar importancia.
- Tener pensamientos despreciables sobre otros y creer que no nos van a llegar de vuelta.
- Sentirse separado de todo y todos, aislado o en batalla continua con el resto.
Tengamos en cuenta estas tendencias del ego, vigilémonos de cerca y no nos permitamos caer en estas trampas que solo traen enorme sufrimiento a nosotros mismos y a nuestro alrededor.